Basta de echarle la culpa de los choques en las rutas solamente al estado en el que éstas se encuentran. Basta de exámenes de alcoholemia. Antes de llegar a un grado de investigación tan elevado lo que se debería hacer es sacar todos los peluches, espejitos y demás pelotudeces que tienen los nombres de toda la prole del colectivero y que van colgados en el vidrio de adelante, así le mejora la visibilidad y deja de chocarse cosas.